Josep Allué Creus, Universitat Autónoma de Barcelona
Evaristo Suárez Fernández, Departamento de Microbiología, Facultad de Medicina de la Universidad de Oviedo
Gemma Escribano Montesdeoca, Barcelona

Imagen: Janice Carr, Centers for Disease Control and Prevention’s Public Health Image Library (PHIL)
Últimos avances en el papel de la microbiota en la salud digestiva y vaginal
La variedad y concentración de las especies de nuestra microbiota presentan importantes variaciones en función de su localización. El mantenimiento del equilibrio de la misma es fundamental para el desempeño de sus numerosas funciones a nivel local y sistémico, como es el caso de la estimulación del sistema inmunitario, la barrera de protección frente a la colonización de gérmenes patógenos por exclusión competitiva (resistencia a la colonización o efecto barrera), limitar la traslocación bacteriana y, por tanto, la diseminación de bacterias a los órganos periféricos, participar en la morfogénesis de los tejidos (efecto eutrófico).Por esta razón, una de las tendencias actuales en el campo de suplementación nutricional es fomentar una composición saludable de la microbiota, favoreciendo el crecimiento de aquellas especies que proporcionan mayores efectos beneficiosos al organismo, entre las que destacan especialmente los lactobacilos y las bifidobacterias. En el presente simposio, trataremos en especial la utilización de probióticos y prebióticos en el caso de los trastornos digestivos leves y la salud vaginal.
El papel de los simbióticos en los trastornos digestivo leves
Los trastornos digestivos menores afectan en algún momento de su vida a un 25% de la población, apreciándose una mayor proporción de consultas sobre síntomas funcionales en mujeres que en hombres. Las causas de su aparición están relacionadas en muchos casos con un desequilibrio de la microbiota intestinal vinculado a unos hábitos de vida inadecuados (dieta desequilibrada, bajo consumo de fibra, estrés, utilización de diferentes fármacos, cambios de alimentación o temperatura…). En estas circunstancias, la utilización de probióticos, prebióticos o de la combinación de los mismos (simbióticos) se relaciona con una reducción del malestar, y una mejora de la calidad de vida y la sintomatología. No todas las alternativas son iguales, por lo que resulta de gran relevancia escoger especies probióticas que mejor se adapten a este tipo de problemática. La combinación de los probióticos con los prebióticos puede ofrecer ventajas al mejorar la supervivencia e implantación de los probióticos en el tracto gastrointestinal, ya que su substrato específico está disponible desde el momento de la ingestión.
Simbióticos orales y salud vaginal
Una flora vaginal equilibrada ejerce unas funciones protectoras y evita la proliferación de agentes patógenos. Por tanto, el tratamiento farmacológico de las infecciones es tan importante como ayudar a restablecer y mantener el equilibrio de la flora vaginal mediante un tratamiento coadyuvante (de apoyo) como es el caso de la utilización de probióticos. En ocasiones, después de haber seguido un tratamiento para una infección, puede ser que la flora vaginal no recupere su equilibrio. Eso hace que se reduzcan los mecanismos de defensa naturales y por lo tanto, se favorezcan nuevas infecciones. En el contexto actual de aumento de resistencias microbianas, prolongación de la esperanza de vida y hábitos sexuales nuevos, el uso de probióticos y aunque en menor medida también de prebióticos para el mantenimiento de la salud vaginal adquiere cada vez más importancia tanto en mujeres en edad fértil como en la menopausia. Además los probióticos se sitúan dentro de las modalidades socialmente entendidas como tratamientos naturales y, por tanto, carentes de efectos adversos. El tipo de probióticos más frecuentemente utilizado en este tipo de productos son los lactobacilos. El uso de lactobacilos como probióticos tiene como finalidad ayudar a erradicar las infecciones vaginales e inhibir las recurrencias al ayudar a inhibir la proliferación de los patógenos y permitir al mismo tiempo la recolonización por la microbiota residente habitual.
Comunicación presentada en el 8º Congreso de Fitoterapia de SEFIT, Zaragoza 2015