Guillermo Benítez a, Marco Leonti b, Barbara Böck c, Amots Dafni d
a Departamento de Botánica, Facultad de Farmacia, Universidad de Granada
b Department of Biomedical Sciences, University of Cagliari, Monserrato, Italy
c Instituto de Lenguas y Culturas del Mediterráneo y Oriente Próximo, CSIC, Madrid
d Department of Environmental and Evolutionary Biology, Institute of Evolution, Haifa University, Israel
Ponencia en el 12º Congreso de Fitoterapia de SEFIT. Murcia, 9-12 de noviembre de 2023

La mandrágora es una de las plantas medicinales más afamadas a lo largo de la historia. Citada como medicinal en La Biblia, los textos de clásicos como Teofrasto, Dioscórides, Plinio, Ibn Sina, y un largo etc., ha estado en uso continuo en todo el periodo histórico, en parte gracias a la transmisión de la información terapéutica escrita, el desarrollo de la imprenta y la divulgación de libros herbales y farmacopeas. Desde entonces se popularizó su uso en zonas donde la planta sólo se obtenía por cultivo. Además, sigue siendo empleada a nivel popular en zonas donde es natural, de forma puntual y en relación con los muchos mitos y leyendas que ha asumido. Sus principales compuestos químicos siguen siendo de amplio uso en farmacia.
Se presentarán los resultados de un análisis histórico de los usos de la planta a través del tiempo (considerando la primera cita inequívoca el Génesis) y el territorio (abarcando todo el Mediterráneo). Buscamos patrones de uso que puedan manifestar diferencias culturales o geográficas, y establecer en que periodos o lugares tuvo mayor uso, o este fue más polifacético. Se analiza la información sobre 88 usos medicinales recogidos a lo largo de 27 siglos en 153 fuentes bibliográficas (587 citas), agrupados en 39 categorías principales. El periodo de mayor diversidad en usos fue el medieval, descendiendo luego en el renacimiento y la edad moderna, apuntando a una proliferación de información no basada en datos previos posiblemente motivada por aspectos culturales o mitológicos. La reducción de su versatilidad apreciada a partir del medievo demuestra un patrón de uso más consolidado en épocas sucesivas, y un alejamiento de falsas creencias. El máximo de citas a sus usos se da en el renacimiento, reflejando un periodo de gran difusión condicionado por la reproducción de fuentes clásicas. Se aprecia una disminución paulatina en el uso de la planta que llevó a que, con el descubrimiento de los anestésicos volátiles, cesase de ser usada en cirugía y en general en medicina y farmacia oficinal.
Se acompaña la disertación de una revisión fitoquímica y un estudio etnofarmacológico en que pretendemos explicar que usos cuentan en la actualidad con evidencia científica. También se mencionarán resultados interesantes de la revisión de los nombres vernáculos de la planta en todo el Mediterráneo (292 nombres en 41 idiomas), destacando los alusivos a su antropomorfismo, similitud a otras plantas, o sus efectos supuestamente mágicos o medicinales.